Foro especial. Conversatorio con el Mocase

Fotos: Hugo Tempesta

El sábado 10 de octubre el Foro de Pensamiento Crítico llevó adelante un encuentro especial con compañeres del Movimiento Campesino de Santiago del Estero (Mocase). Adolfo y Micalea, ambos parte de la coordinación pedagógica del movimiento, compartieron visiones del mundo y diversas experiencias que esta organización comunitaria supo construir en estos 30 años de lucha.

Un diálogo de saberes

“Buenos días. Muchas gracias por la invitación. Estamos muy contentos de estar acá. Esta semana fue movida, estuvimos enfrentando desalojos, es una tarea de todos los dias. Teníamos ganas de conversar con ustedes. Para nosotros estos lugares son un momento de diálogo de saberes, sepan desde ya que no vamos a dar ninguna charla, quermos aprender juntos.”

Son las 10:30hs del sábado 10 de octubre y con estas palabras, Adolfo y Micaela, integrantes del Movimiento Campesino de Santiago del Estero, dan inicio a un nuevo foro de pensamiento crítico.

Durante más de dos horas ambos compartirán reflexiones y saberes construidos a lo largo de estos 30 años de vida del movimiento. Saberes que emergen de una lucha que sabe de violencias, de muertes, de abusos del poder, de desalojos; pero también sabe de amor, de ternura, de sueños compartidos. Una lucha que recupera saberes ancestrales y tiene en la tierra, en el agua y en las semillas la potencia para imaginar otro mundo de posibles.

Aquí un pequeño punteo, a modo de “toma de apuntes” para compartir una porción de los que nos dejó el encuentro.

Nadie es dueño de la tierra

Alfredo y Micaela nos cuentan de los desalojos. De cómo llegan a Santiago empresarios locales o de otras latitudes a querer quedarse por la fuerza con territorios habitados por las comunidades. Nos cuentan todo lo que implica hacerle frente a un desalojo. La pregunta por si no es posible otorgar títulos de propiedad a las familias para que no las desalojen no se hace esperar. La respuesta de los compañerxs nos deja pensando.

“Bueno, es un poco difícil todo este tema, porque ahí tenemos toda una discusión, incluso, con las actuales leyes. Este sistema no reconoce otra forma que no sea la propiedad privada. Y para nosotros el tema de la tierra no es un tema de propiedad privada, de ponerla a nombre de alguien y listo”

“Nadie es dueño de la tierra. O en todo caso dueños somos toda la comunidad en su conjunto. La tierra siempre queda, nosotros estamos de paso. No puede ser propiedad de alguien. Por eso siempre decimos que la tierra tiene que tener una función social.”

Universidad campesina

Hace unos años el Mocase desarrolla un proyecto de Universidad Campesina. Sobre el tema les compañeres nos comentaron:

“La Unicam surge de una necesidad: que los jóvenes puedan formarse sin tener que salir de las comunidades, de los territorios, del lugar donde transcurre su vida.”

“Hace más de 10 años estamos en el predio, en el departamento de Ojo de Agua. Al momento funciona la escuela de Comunicación popular y comunitaria. Y este año empezamos con la de psicología social. En la comunidad de la unicam viven 70 estudiantes y se organizan por grupos de trabajo. Además de cursar las materias específicas de cada escuela. Se producen alimentos y se crían animales. Hay espacio de la cocina, el espacio de la niñez.”

“A las carreras les decimos escuelas, porque también apuestan a otra forma de construir conocimiento. Los programas para cada materia se construyen colectivamente.”

“Creamos un sistema universitario de rotación. Nosotros le decimos de alternancia. Un sistema indo-rural-campesino.. Este sistema permite que no haya desarraigo ya que los compañeros y las compañeras están dos meses en la universidad y dos meses en la comunidad y así van rotando. Antes de la Unicam nos pasaba que los jóvenes que iban a la universidad a las capitales y volvían a la comunidad se olvidaban de sus orígenes. Es importante para nosotros hablar esto con los jóvenes: pasar por la universidad no te hace más que los demás, sino que es la posibilidad de contar con más herramientas para poner a disposición de la comunidad”

Feminismos sin patrón

Otra pregunta que hicieron varios compañeres del foro es la vinculación del movimiento con los feminismos y en ese marco el rol de las compañeras mujeres dentro de la comunidad.

“Para nosotros feminismo es defender la madre tierra. Cuando uno defiende el monte, cuando una compañera se para frente a una topadora para evitar un desalojo, eso es feminismo.”

“No separamos feminismo y lucha de clases. No hablamos de roles.Tratamos de no compartimentar la estrategia de lucha.”

“Las mujeres lideran las luchas históricas. Son las que se han parado (y las que se paran) frente a las topadoras cuando vienen a desalojar.”

“Para nosotros los grandes centros son las periferias: ahí es donde están las mayorías golpeadas por este sistema. Los y las condenadas de las políticas neoliberales.” 

“En nuestras maneras de producir también están nuestros sueños. Por eso producir una lechuga también es feminismo. Luchar contra los gorilas y los patrones es un golpe al colonialismo y al patriarcado.”

“Ninguna bandera que nos represente puede ser patronal. El feminismo popular tiene que ser sin patrón”

La vuelta al campo

Uno de los temas que es parte de la cosmovisión del Mocase es la necesidad de volver al campo. Volver a la tierra, para producir otros modos de alimentación que son de alguna manera otros modos de vida. Otra vinculación con todo lo que hace a la vida.

“Desde nuestra concepción pensamos la agroecología y la soberanía alimentaria como gobernanza. Esto es una mirada geopolítica. La soberanía alimentaria es hembra, en el sentido estratégico, es madre que ayuda a crecer este movimiento.”

“Muchas veces nos preguntan qué pensamos cuando la gente habla de “soberanía alimentaria”, o si nos molesta que la palabra esté “de moda” cuando fue algo que surgió de nuestras luchas. Nosotros respondemos que es fundamental desarmar los egoísmos de “esto lo cree yo”. Nosotros estamos en contra de la propiedad privada, incluso la del saber, la del aprendizaje. Todas estas ideas son herramientas que se piensan en distintos lugares y se ponen al servicio de la lucha por la libertad de los pueblos. Sin libertad de los pueblos no va haber paz”

Educar para qué

Además de la Unicam los compañerxs del mocase se preguntan por otras instancias de formación. De ahí que desarrollen un fuerte trabajo vinculado a la niñez así como también se planteen desafíos en torno a la escuela.

“En la escuela históricamente se castigó al chico que hablaba quichua. Muchos nos criamos con ese miedo de saber que si hablabamos quechua nos iban a castigar. Eso es muy represivo”

“La figura de la maestra es muy fuerte en la comunidad. Si la comunidad no está organizada la maestra es la jefa de la comunidad. Cuando la comunidad se organiza es la jefa de la maestra. Por eso siempre insistimos con que tenemos que crear nuestros propios maestros y maestras campesinas”

“Entonces nos preguntamos si educamos para disciplinar o para liberar.”

“Una educación liberadora es aquella que permita a cada quien caminar todos los caminos que quieran.”

“Para nosotros la cultura va mucho más allá de una chacarera y una zamba: es la pregunta de cómo queremos vivir.”

“La inteligencia del monte no está valorada. Hay una reserva moral muy fuerte dentro del campesinado santiagueño que cuando la saca para afuera es muy poderosa”

Estar más solidarixs que nunca.

Otro de los puntos conversados fue la actual pandemia producida por el Covid-19 y las estrategias del movimiento para hacer frente a la situación. 

“En este tema creemos que hay dos grandes cuestiones. Por un lado tenemos a grandes medios de comunicación aliados con una derecha terrible queriendo golpear la democracia.Entonces ahí hay una primera tarea: cuidar la democracia. No queremos más compañeros muertos.”

“Por otro lado no hay que permitir que nos gane la desesperación. Hay que pensar estrategias a largo plazo. No es una cuestión de avanzar mirando el reloj. Es un tema de tiempo. A veces parece que nos maneja la mente y el corazón el reloj. No hay que permitir eso. En algún momento vamos a salir, pero es tiempo. No hay un reloj mágico.”

“Tenemos que seguir produciendo alimento y que llegue a los pueblos. A la pandemia le podemos dar batalla si nos alimentamos sanos. Que la producción llegue a los barrios carenciados, tiene que llegar a los que menos tienen. No todos pueden comprar cosas agroecológicas. 

“Los humildes del mundo necesitamos estar más solidarios que nunca compartiendo lo poquito que tenemos”

“Por eso es importante ver que lo que abre esta pandemia es la discusión por otra cultura política. Si tenemos la cura del coronavirus pero no podemos alimentar a los más humildes es una falacia.”